lunes, 2 de octubre de 2017

1.300 kilómetros en el día de la suelta ya no es barrera insalvable.

"...Y fue a las veintidós cuarenta y siete que ocurrió...ninguna vuelta....el descenso lento que es común en la oscuridad y la paloma que se aplastó en la plancha de entrada, con las alas bajas..."
 Con esta alegría y emoción contenidas, Bellani nos describía el preciso y mágico instante en el que su "INCREIBLE" cubría la distancia de 1300km en el día. Macho, como otras de sus palomas, que leeréis después, también había volado la distancia de 1.200km anteriormente.

Este capítulo de hoy pone fin a la trilogía del gran Bellani. Os dije que leyerais entre líneas. No es oro todo lo que reluce, aunque lo parezca, pero sin duda alguna estos tres artículos de nuestro amigo merecen ser perpetuados.


Por cierto, he habilitado en cada una de las entradas que a partir de ya se publiquen, la sección de comentarios, por si os apetece dar vuestra opinión.  






PabS.

2 comentarios:

  1. Viene de lejos, y se confirma una y otra vez, las teorías de las alas perfectas, los ojos, los riñones, todo lo que podemos mirar, lo que realmente manda en la selección, es la cesta, de los que regresan de largas distancias, hay de todos los tipos. Esta vez lo dice Bellani, pero hoy en día ya debería ser una cosa más que interiorizada por los colombofilos.

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  2. Tercer ciclo...tienes toda la razón, pero de interiorizada nada de nada....creo que lamentablemente tendemos a lo contrario. Hay hechos no teorías.
    Gracias por participar.

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